Caricamento in corso...
luis barreda

Lo Que Aprendí A Soltar

Lo que aprendí al soltar
 
Tuve que aprender que el tiempo no se ata,
que es un río que fluye sin ser capturado,
que la eternidad no cabe en mis preguntas
y que solo soy un instante iluminado.
 
Acepté que este cuerpo, frágil y cansado,
no sería un templo para la inmortalidad,
que en sus arrugas guarda el paso de los años
y que un día será polvo, solo humedad.
 
Entendí que somos memorias olvidadas,
retazos de risas, susurros en la oscuridad,
días que se esfuman como nubes viajeras,
noches que se llevan lo que llamé “verdad”.
 
Reconocí que todo es camino prestado:
las casas, las calles, el pan de cada día.
Nada es para siempre, ni siquiera el abrazo;
todo se transforma cuando el sol se enfría.
 
Aprendí que los hijos no son mi reflejo,
sus alas se abren hacia otros horizontes.
No son mías sus sueños ni sus derrotas,
solo presté raíces para sus coronas.
 
Los padres que un día me dieron la vida
se volvieron sombras en el mismo sendero.
Su amor fue un faro, no un puente eterno:
la muerte nos junta, pero el adiós es primero.
 
Las cosas que atesoré con tanto empeño
—libros, fotos, tazas llenas de recuerdos—
son solo préstamos de un mundo ajeno,
huellas que otro borrará con sus dedos.
 
Hasta este cuerpo que siento y que habito,
hasta el aire que nombro como “mío”,
son parte de un ciclo que no me pertenece:
la tierra reclama lo que el tiempo cría.
 
Los árboles que planté con mis propias manos,
el perro que dormía junto a mi cama,
las flores que corté para adornar el vaso...
Todo tiene un ciclo. Nada me reclama.
 
Al fin me rendí: dejé de forzar puertas,
de acumular razones como monedas vanas.
Ahora barro mi acera sin pensar en dueños,
mientras miro caer las hojas de la mañana.
 
La vida no pide permiso para cambiar,
no negocia con nuestros planes de hierro.
Es viento salvaje que dobla los caminos,
es semilla que crece en el mismo invierno.
 
Y así, sin batallas, sin miedo al olvido,
acepto lo efímero de esta luz que me alumbra.
En vez de aferrarme, tejo con lo que tengo:
un canto sencillo donde la paz se desnuda.
 
—Luis Barreda/LAB

Altre opere di luis barreda...



Alto