Cuando una angustia siga a otra
Y una pena suceda a una mayor
Hay un lugar donde lo malo se transmutara
Donde lo adverso siempre se disolverá
Es crisol de paciencia y humildad
Donde el Cristo siempre brindara su luz
Nuestro corazón
Henchido de Incondicional amor
Como el fuego templa al hierro
Las penas templan nuestra devoción
Cual nave en medio de la tormenta
Sacudida por las aguas de la emoción
Nuestro empeño sera tomar gobierno
del universo interior
Para ofrendarlo todo
Al radiante Amor de Dios