Caminando
Voy, con las huellas contando uno más uno.
Voy con la cabeza derecha con las gríngolas
bien puestas.
La estupidez se anda comiendo al mundo,
la inteligencia es un gen que no alcanza tumultos.
Aquí todos quieren impresionar, mas no se miran en
el espejo de la vida real.
Lo social ya no es más que una pantalla; Dime, cuantas
noches no le lloras a la almohada?
La existencia es un regalo, más cual niño malcriado,
malgastas momentos y has roto tu contento.
Pinceladas habitan y varias caritas felices, apapuchando
las luchas del ser en lo más profundo.
No me creo vivo ejemplo, menos pretendo serlo; solo quiero
ver un mundo, donde el amor sea el orden y el odio lo absurdo.
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