Era la noche más hermosa mis pensamientos se enlodaban con su sonrisa, mirando hacia el cielo su mirada deslumbra en mi mente. Un deseo, solo uno. Le pedía a esa luna roja que muchos contemplaban, esa luna testigo de nuestro amor. Ella merece ser feliz, porque ella es como ese eclipse que todos al ver suspiran. Ella es esa noche mágica llena de brillo porque es el brillo en la tierra. Simplemente ella es esa luz que ilumina mi corazón.