#EscritoresCubanos
Rasgando las neblinas del Inviern… Como velo sutil de níveo encaje, Apareces envuelta en el ropaje Donde fulgura tu verdor eterno. El cielo se colora de azul tierno,
En la noche azulada y silenciosa Del seno de la Tierra se levanta Una voz sepulcral, triste, amorosa… Que así a mi oído, entre las sombr… «Cruzando por los mares de la vida
Rostro de asceta en que el dolor s… Como el frío en el disco de la Lu… Mirada en que al amor del bien se… La firme voluntad del hombre fuert… Tuvo el alma más triste que la mue…
Cuando la vida, como fardo inmenso… Pesa sobre el espíritu cansado Y ante el último Dios flota quema… El postrer grano de fragante incie… Cuando probamos, con afán intenso,
Voz inefable que a mi estancia lle… En medio de las sombras de la noch… Por arrastrarme hacia la vida breg… Con las dulces cadencias del repro… Yo la escucho vibrar en mis oídos,
Monstruo de piedra, elévase el cas… Rodeado de coposos limoneros, Que sombrean los húmedos senderos Donde crece aromático el tomillo. Alzadas las cadenas del rastrillo
Cuando yo duerma, solo y olvidado, Dentro de oscura fosa, Por haber en tu lecho malgastado Mi vida vigorosa; Cuando en mi corazón, que tuyo ha…
Noemí, la pálida pecadora De los cabellos color de aurora Y las pupilas de verde mar, Entre cojines de raso lila, Con el espíritu de Dalila,
Yo no amo la mujer, porque en su s… Dura el amor lo que en la rama el… Y mi alma vistió de eterno luto Y en mi cuerpo infiltró mortal ven… Ni con voz de ángel o lenguaje obs…
No me habléis más de dichas terren… Que no ansío gustar. Está ya muer… Mi corazón, y en su recinto abiert… Sólo entrarán los cuervos sepulcra… Del pasado no llevo las señales
Tú sueñas con las flores de otras… nacidas bajo cielos desconocidos, al soplo fecundante de primaveras que, avivando las llamas de tus se… engendren en tu alma nuevas quimer…
En el verde jardín del monasterio, Donde los nardos crecen con las li… Pasea la novicia sus pupilas Como princesa por su vasto imperio… Deleitan su sagrado cautiverio
Sonrisas de las vírgenes difuntas En ataúd de blanco terciopelo Recamado de oro; manos juntas Que os eleváis hacia el azul del c… Como lirios de carne; tocas blanca…
Al pie de la blanca reja De una entreabierta ventana, Donde la luz se refleja De la naciente mañana, Está un polaco guerrero
Noche de soledad. Rumor confuso Hace el viento surgir de la arbole… Donde su red de transparente seda Grisácea araña entre las hojas pus… Del horizonte hasta el confín difu…