Cuando todas las cosas existían si… bajo el azul intacto de los cielos… Jehová le dio músculos poderosos a… y a la mujer los senos. Esa, sin duda alguna, fue su obra…

Yo soy como una nube que da sombra… soy una hoguera efímera que no dej… Yo soy el buen amor y el mal amant… Dime adiós y sonríeme: Soy el amo… Soy el amor que olvida pero que nu…

Llamarada de ayer, ceniza ahora, ya todo será en vano, como fijar el tiempo en una hora o retener el agua en una mano. Ah, pobre amor tardío,

Arquero de la noche, con un gesto… alcé el arco en la sombra y apunté… Arquero de la noche, mi pulso esta… y en mi carcaj había solamente una… Y vigorosamente lancé mi flecha al…

Entre la muchedumbre que ríe y se… por las iluminadas calles de la ci… me llega tu recuerdo con un sabor… mujer de mis tristeza y mi felicid… Y, así, esta noche alegre tengo lo…

He aquí dos rosas frescas, mojadas… una blanca, otra roja, como tu amo… Y he aquí que, lentamente, las dos… la roja, en vino blanco; la blanca… Al beber, gota a gota, los pétalos…

A veces me pregunto dónde estarás… después de tantas noches sin tu ma… noches de abrir un libro para espe… noches de largo viento por la call… A veces me pregunto si hay alguien…

Puedes irte y no importa, pues te… como queda un perfume donde había… Tú sabes que te quiero, pero no te… y yo sé que eres mía, sin ser mío… La vida nos acerca y la vez nos se…

Amamos porque sí, sencillamente porque sí, sin saberlo, como cuando la espiga se levanta, como la lluvia cuando está cayendo… como el viento que pasa y no lo sa…

Viejo lobo de mar, de sed sorda y… El humo de tu pipa tiene olor a to… Si relatas tus viajes ya nadie te… porque siempre naufragas en el fon… y cada travesía concluye como empi…

Navegante del alba, naufragaré por… ya con los ojos turbios de viajar… se undirá mi navío con su carga de… Ya he visto en la niebla la dura c… en la noche de hielo en las fosfor…

Érase un verde bosque de eterna pr… y érase un niño iluso que vagaba a… El niño entró en el bosque siguien… entró en el bosque... y nadie lo h… Érase un mar sereno, de tan hondo…

Yo le entregué mi corazón al vient… en una encrucijada del camino, al viento de invisible movimiento que se va sin saber de dónde vino. Así por el camino polvoriento,

Amigo: sé que existes, pero ignoro… no lo he sabido nunca ni lo quiero… Pero te llamo amigo para hablar de… que es el único modo de hablar de… Esa mujer es tuya, pero también es…

Era un vetusto templo de ennegreci… durante largos siglos olvidados en… Trepándose y retorciéndose por las… lo apresaban sus verdes tentáculos… Pórticos apretados y techos derrui…