#EscritoresPeruanos
Cuando el señor Pérez salió de su… No encontró su automóvil Ni la ciudad en que vivía No encontró sino vidrios Y un deslumbrante animal
En el sombrero de fieltro de Beuy… Hay un conejo asustado Que se llama vida Hay una flor de margarina Dos o tres gotas de sangre humana
Guardo de Lima una botella Llena de lluvia Y un puñado de arena En el pañuelo. A veces recuerdo La luz de su nublado cielo
Levanto una mano A la altura del ombligo y con la o… Sostengo el hilo ciego que me llev… Hacía mí mismo. Penetro en corred… Me estrello contra bilis nervios e…
Sonríe Dios en la pantalla Del cielo. Veo su semblante Hecho de rayas y puntos Luminosos. Pero no estoy seguro Si es el suyo o es el mío
Si alguna vez confundes Tu corazón con tu sexo y tu sexo Con un saxofón que llora En una calle oscura O si derramas amor a manos llenas
Veo una esfera amarilla Pero cuadrada que apenas brilla Y ya no es nada. Veo millares De esferas amarillas Que no son cuadradas
¿Conoces tu cuerpo esfera… esfera de la noche Huracán solar conoces tu cu… Conoces tu cuerpo conoces Tu admirable cabeza tus piernas mo…
Fantasma que estás en el harpa y l… En bajorrelieves de música o torre… Hiciste tu tumba en un piano, fant… Entre cuerdas doradas el fauno son… Te sopla los ojos en globo a la lu…
Si la mitad de mi cuerpo sonríe La otra mitad se llena de tristeza Y misteriosas escamas de pescado Suceden a mis cabellos. Sonrío y… Sin saber si son mis brazos
Escribo algo algo todavía algo más aún añado palabras pájaros hojas secas viento
La paz de Octavio Era esa luz azul Que llevaba en la solapa Y que le permitía ver el revés De las cosas. Gracias a ella
Escribo orejas solamente orejas No sé por qué pero no escribo uñas Ni corazón ni pestañas No sé si escribo o si tan sólo res… Ya no distingo entre el invierno
Camino entre mi sombra Y la sombra de los pinos. Mi cuer… Es un puñado de hierba a la deriva Y el bosque azul que me rode Soy yo mismo que respiro. Y a no…
No tengo límites Mi piel es una puerta abierta Y mi cerebro una casa vacía La punta de mis dedos toca fácilme… El firmamento y el piso de madera