Voy a oprimir este recuerdo hasta que se destroce en esos pequeños fragmentos que mi memoria, obsesiva de los cuentos, no para de recoger para alimentar a esta bestia, poderosa bestia, llamada imaginación.
El futuro esconde la muerte, los inevitables cambios. Como un cofre bajo el océano, y yo debo ser el océano.
Plácidamente, en el ácido de la mente: así me pasa el tiempo del recuerdo… del olvido a la disolución; sólo dos problemas y una solución:
Me he puesto como tierra a dormir… y el sepulturero me hiere justo en… el corazón, la tumba, y las manos incansables, el talón… la longitud ensordecida
extrañar es una palabra la cual no… palabra extranjera, exterior, que… como ella, fuera de lo común a extrañarnos qué extraño extrañar lo extraño a…
suspirando el corazón violentament… provoca en mi garganta la náusea e… agua enamorada se esparce en coágu… hasta la lengua hablante y casi si… he dicho tantas veces lo ya dicho
Subí al ascensor. No sé si toqué algún botón, pero s… Aburrido, noté que no se marcaba e… de ningun piso bajo el cero o sobr… El viaje, paulatinamente, aparenta…
Estrellas sobre el campo. Y algo más allá: una verdad inexti… Perpetuas bellezas, y ya idos bail… Si hay un cuerpo hay dos cuerpos, y de espaldas a la tierra, almas c…
De nuevo, de buenas a primeras digo: giro en tu ombligo, en espiral hiriente, gravedad que destina
Cuánto tiempo he pasado pensando en vos. Pregunto sin preguntar, respondes sin responder... El amor,
1) Lo antológico, mi terreno de juego, mi parque donde espere amigos a mo… pero se fueron, descuidadas, las h…
Edificarás o mortificarás. A la miel o a la hiel irá la lengu… Y entre muerte y vida el péndulo b… al ritmo del reloj o del corazón. Nacer o morir: tienes aquí
Me sentí triste con Violeta, arrugué la frente con María, levanté una ceja con Cristina, me volví aburrido con Melina (tuve mis sueños eróticos con Amel…
Entre las líneas de tu nombre no residen tus ideas tu nombre no es tu nombre tus palabras son las palabras que… no son tus palabras las ya dichas
Eso no es aquello, sino que esto viene presentemente a quien dice que todo aquel, el cual hable de ti o de mí, pueda decir yo o tú, aunque él sea
Lees y relees aquel poema de palabras tan generales y, a la vez, exactas. Lees con tus ojos, con el designio natural que a la poesía uno otorga. Increíble, pero las palabras se empiezan...