A las cajas con cabezas les gusta el sonido de los bordes. El establecimiento de lo eterno en la sociedad de los Sin Nombre. La suprema rima de los sonetos,

El río tranquilo figura de nuevo tu cara sin sorpresa. Late tu corazón entre instantes. Todo ha pasado

Sólo yo y aquella piel blanca donde escribir palabras que se hun… náufragos de tinta, el horizonte donde amanece distint…

De nuevo, de buenas a primeras digo: giro en tu ombligo, en espiral hiriente, gravedad que destina

Había una razón de ser entre tanto guiso de hilos, pero tenía que perderla. Tenía que perderla, hilando fino, estirando el suéter,

llorar, llorar de verdad, no por t… llorar como correr; llorar con tri… decir como llorar; y tristemente,… del ojo hacia algún sitio, tu piel… llorar como la lluvia, en el aire,…

Mi mirada salta la flor, el edificio, la montaña —viaja más rápido que el avión, más transparente que la lluvia—,

Sin duda todo desaparece. Sin dud… El cuerpo, la máquina se rompe. La piedra pierde piedras en el agu… El agua pierde gotas que se herman… Y la sangre deja de ser la sangre,…

Una narrativa así te lleva te lleva te lleva... ¡Es increíble! Así son las mansas de entrecasa, los baldazos de agua fría

Edificarás o mortificarás. A la miel o a la hiel irá la lengu… Y entre muerte y vida el péndulo b… al ritmo del reloj o del corazón. Nacer o morir: tienes aquí

Sobreviene, humano, el espacio de los días, el tiempo, los pies con esperanza. Tu ser en la soledad no se amenaza…

Feliz, pared, feliz. Feliz, puerta, feliz. Feliz, ventana, feliz. Feliz, casa, feliz. Feliz, tierra, feliz.

quien huye del desierto, de la tragedia, ve abrirse ante él un oasis, ilusión de prisión, donde, como mano de niebla fría o como nube llena, gorda, que haya prometido luz de rayo en su ...

Vine a vivir a este jardín, pero sus flores me decian: “ahora somos más profundas que nue… hemos intentado por mil colores in… que no nos arrancaras,