Soy una ardilla de alma sencilla de Amecameca que nunca peca. De ojos brillantes

Antier, de madrugada, el cielo fue distinto como en un laberinto la luna despintada se debatía espantada

Ciento siete aniversario del equipo de linaje, del América, un tatuaje en el alma su ideario la copa gran corolario

La censura va con todo, revolcándose en el lodo de su falta de respeto, adentrándose en el veto. El “mesías” ni la despista,

En los medios ya se siente la censura disfrazada la dictadura trazada en complicidad silente que va despidiendo gente

Pero el pueblo no escarmienta la verdad no se exagera la izquierda solo genera pobreza y bien la alimenta con miseria la incrementa

La risa, el “desmadre” lacio, se han instalado en Palacio, el show cómico mágico musical se ha hecho clásico. Así, en cada mañanera

Lisonja en versos, castalia, provengo de bella Italia, soy benéfica sustancia, de leyenda añeja, rancia. Fui casual descubrimiento,

Yo, soy hijo de Janitzio quiero volver al buen inicio en límpidas aguas y espumas aunque me agobien mil brumas. ¡Nadando entre las olas voy,

Soy la ilusión de mí madre y el orgullo de mí padre, desde hace tiempo me esperan antes que me concibieran. Yo ya estaba en el programa

En cada gota del lago, hay historia, hay empalago, leyenda, recuerdos vivos, ensueños, sendos motivos: Sucedió hace mucho tiempo,

El crimen organizado muestra sus habilidades e incrementa actividades por López tiene asentado en México su reinado

Tengo poco que decir, por eso, no debo mentir, no fui su hermano, su amigo, pero eso sí . . . fui testigo. De su entierro doloroso,