SONETILLO
#Andaluces #Españoles #Modernismo Francisco Villaespesa
De la vida me lanzo en el combate sin que me selle filiación alguna, y atrás no he de volver, hasta que… a mi triunfante carro la Fortuna! Contra mis enemigos, terco y rudo,
Frescura matutina del paisaje... Verdores temblorosos del rocío... A veces bajo el túnel del ramaje brilla al sol la serpiente azul de… Hay olor de vendimia en los parral…
Tardes de Paz... Monotonía de lluvia en las vidrieras... Se extingue el humo gris del día..… ¿En dónde están mis primaveras? La lluvia es una fantasía,
Ante la Virgen que adorabas tanto rezaba con tan ciega idolatría, que entre mis labios la oración mo… estrangulada por mi propio llanto. La imagen, impasible a mi quebrant…
Para cantar mi mente quiero un ver… un verso que refleje la cándida tr… del azahar, que, trémulo, deshoja… a las blancas caricias de una tími… No amortajad mi cuerpo con el saya…
En férreas contracciones de serpie… ondula el tren por la campiña verd… cruza en nervioso trepidar un puen… y en la sombra de un gran túnel se… Surge a la gloria de la luz dorada
Al mirar del paisaje la borrosa tr… y sentir de mi alma la sorda pena… pienso a veces si esta dolorosa am… surge de mí o del seno de la Natur… Contemplando el paisaje lluvioso e…
Enferma de nostalgias, la ardiente… al rojizo crepúsculo que incendia… su anhelo lanza al aire, como un h… tras la ideal paloma de una Thule… Sueña con las ergástulas de la Ro…
La noche me envolvió como un perfu… y en el silencio tus pisadas eran un lento resbalar de terciopelos sobre una frágil ilusión de seda. Tembló tu corazón bajo mi mano
En la penumbra se destaca el lecho donde la luz solar la sorprendía, apoyada la sien sobre mi pecho y dormida su mano entre la mía. Brillan las trenzas largas y casta…
Yo te he deshecho, ¡oh muerta cabe… para que recatases, destrenzada, el pudor de una virgen desposada que desnuda se vio por vez primera… La ágil caricia de tus sedas era
Soy un alma pagana. Adoro al dios… y persigo a las ninfas por las ver… y me gusta embriagarme en mis líri… con vino de las viñas del viejo An… ¡Que incendie un sol de púrpura de…
En la paz celestial de las alturas… cual velos de quiméricas huríes, nubes blancas, doradas, carmesíes, despliegan sus eternas vestiduras. Garzas de epitalámicas blancuras,
El alba ciñe las primeras rosas espejo de la mar bruñido, y agranda las pupilas ojerosas la expectación de lo desconocido. El sol disipa el matinal celaje,
En las aristas de las altas cumbre… la última brasa de la tarde humea. Un silencio de paz duerme en la al… que eleva entre los huertos sus te… Y al corazón aquieta una saudade