Baldomeru salía con la fresca antes que’l gallu tuviera gana de… con la burra zurcia, la albarda ti… y’l zurrón llenáu de pan duru y br… Caminu pa bajo, caminín pa rriba,
Aun yo sentia brillar de tus pupilas con mi presencia en mi tristeza brotaran los colores
cuando viniste no imagine que un dia llenarías todo flores de sangre reciben al verano
A volte mi sembra che non sei mai… che ti ho inventato in qualche pom… di pioggia senza nome. Non ci sono tue ombre sulle pareti… né impronte sul legno consumato,
Tíu Melchor, con su gorra escurrí… vivía onde’l aire peinaba la umbrí… con gatos, con trapos, con yerbas… decía que la ciencia la traían los… Sabía de verrugas, sabía del mal d…
No me miró distinto. Fui yo el que empezó a leerla como si fuera poesía.
I tuoi occhi, finestre infinite, che aprono la tua anima alla mia vita.
No hay promesas flotando en el agu… ni despedidas en la orilla dormida… Solo el vaivén de lo que nunca pes… el murmullo leve de lo que no exig… Te miro desde el rincón sin sombra…
Don José María, benditu seiga, que bajasti del cielu en alforjas… como l’aire claro que baja a la je… cuando el sol d’eneru dora la tier… Vinisti callandu, con traje sencil…
Guardando indietro, forse il passare degli anni placa i fuochi che hanno distrutto tutto ciò che hai lasciato. Le tue ceneri perdurano,
La mia puerta siempre ta entreabie… por si’l mi mozu vuelvi de la guer… La jera está seca, la sierra muda, y yo calo rezus en la viuda. La silla chiquina sigue a un lao,
Vino el otoño se marchitó la rosa durmió la vida
Eras brisa en una estancia quieta, luz filtrándose entre los días, una ausencia que nunca faltó, la presencia que nunca pesó. Hablabas sin hablar,
El tiempo pasa y no nos damos cuenta casi es invierno
Voglio sentire la tua risata come mia, svegliarmi al tuo fianco ogni giorno che mi rimane, guardarti e che tu mi guardi,