#EscritoresCubanos
Nada entiendo, Señor, di lo que h… Virgen es todo acto, el más impuro… Yo no puedo llegar a esos oscuros ángeles que he engendrado y que he… Acto, reminiscencia de lo puro,
Una cara, un rumor, un fiel instan… Una cara, un rumor, un fiel instan… ensordecen de pronto lo que miro y por primera vez entonces vivo el tiempo que ha quedado ya distan…
Uno vuelve a subir las escaleras de su casa perdida (ya no llevan a ningún sitio), alguien nos llama con una voz querida, familiar. Pero ya no hace falta contestarle.
Sosteniendo las copas invisibles, familiarmente, eternamente juntos en el lecho de la fecundación y de la muerte,
Toma mi mano, hazme sentir que estás cerca en la novedad de esta hora en que mi mano es nueva en tu mano… y es mi mano porque tú la tomas
Oh vosotras, lámparas del otoño, más fragante que todos los estíos! ¿Por qué ha de ser aquel que deven… con el tiempo, más real, menos efí… que aquel que fuimos a tus luces p…
Simpatizando con los oros gastados de la tarde, después del ruido de la fábrica, del ring voceante, de la extraña persecución intermin…
¿De qué silencio eres tú silencio? ¿De qué voz, qué clamor, qué quién… Abismo del azul, ¿qué hacemos en t… hijos de la palabra como somos? ¿Qué tienes tú que ver, di, con no…
Al despertar uno se vuelve al que era al que tiene el nombre con que nos llaman,
La banda gigante, como los alones de su sombrero provocador al frente, quiere romper, inaugurar lo enorme. (Lo enorme, cariñosamente, brilla). ¡La banda gigante, como las ligas gigantes...
Y sin embargo sé que son tinieblas las luces del hogar a que me aferr… me agarro a una mampara, a un hond… y sin embargo sé que son tinieblas… Porque he visto una playa que no o…
Si mis poemas todos se perdiesen la pequeña verdad que en ellos bri… permanecería igual en alguna piedr… junto al agua, o en una verde yerb… Si los poemas todos se perdiesen
Quién sirve como un romano —ese monarca natural—una cena? A quién no merma
Tú solo, bello niño, puedes entrar… Yo entro a ciertos verdes, ciertas… Tú solo, bello niño, puedes llevar… ausente del difunto, distraída y r… La ropa dibujada, el sombrero del…
A veces, en raros instantes, se abre, talud real y enorme, el tiempo transcurrido. Y no es entonces