Mientras caminaba las plumas angelicales... limpiaba mi vista.
La melodía era suave, y las emociones combinaban expectativa con deseo.
La luz trasmutaba la oscuridad.
Del abrazo lunar, el cielo se hizo un mándala, la vida me dono un halo de protección.
Desde allí fui cuervo milenario, simio afectuoso, vida programada.
Entere rombos y fractales,
Cuestiones y certezas.
Fue un lindo viaje, en donde el mensaje de guerrero de ultratumba animaba mis ánimas.