Como otras veces cuando la angusti… le finge graves cosas hurañas, la infeliz dijo, después que el ro… vómito tibio mojó la almohada, las mismas quejas de febriciente,

Al astrólogo ensueño, sus novias:… contáronle el secreto de unas cosa… que un ruiseñor lunático, que cant… puso en sus sinfonías esas extraña… Era un noble pronóstico, que, enig…

¡Oh, señora: gentil dama de mis no… ¡Oh, señora, mi señora, yo le rueg… que abandone esa romántica novela: orgullosa favorita de sus dedos! Que abandone sus historias de aven…

Ya puestos en camino, la fuerza propulsara de la marcha nos impele a seguir, con la serena actitud, sin desmayos, de la causa sustentadora de un ideal glorioso,

Hoy recibí tu carta. La he leído con asombro, pues dices que regres… y aún de la sorpresa no he salido ¡Hace tanto que vivo sin sorpresas… «Que por fin vas a verme que tan l…

¡Déjala, prima! Deja que suspire la tía: ella también tiene su pena… y ríe alguna vez, siquiera, ¡Mira que no te ríes hace tiempo! Suena

Un instante no más. Vengo a canta… la canción del laurel. ¡Alza la fr… que es la única digna del presente que, en mi salutación, voy a dejar… Tendrá el orgullo de tu sentimient…

Anoche, terminada ya la cena y mientras saboreaba el café amarg… me puse a meditar un largo rato: el alma como nunca de serena. Bien lo sé que la copa no está lle…

Sobre la acera, que el sol escalda… doblado el cuerpo la cruz obliga lomo imposible, que es una espalda desprecio y sobra de la fatiga, pasa la vieja, la inconsolable,

¡Siempre el mismo! Ingrato ¿Te pa… que jamás volvamos a encontrar tus… Sí, nunca hallaremos romero más lo… ¡Qué cosas las tuyas! ¡Irte a las… No mereces casi que así te lloremo…