De dónde salta para no dislocarse… De dónde venía el extraño furor qu… Tal vez de una lengua que permanec… O quizás de los torbellinos que so… Él le ha hablado en la ciudad

Una mosca de manicomio Insiste en atravesarlo el rostro Le habla con la lentitud Del que muere en cada una de sus p… Y al abrirle los labios

La abeja los castillos los ciegos Los ciegos que descienden con una… Yo he pasado esperando toda la vid… Este enigmático horizonte En cuyas riberas se han perdido to…

Como en otro tiempo se abrirán las… A la señal de la hoja Todo el espíritu se descargará de… Yo pasaré entonces por ese sendero… Y me contarán las más extrañas his…

Son tibias turbias y viciosas Buscadas a nubes a labio a insomni… Un jadeo una voz cruel Y hasta una historia para el ramaj… Semejante a ese mar insensible de…

El más negro vuelve la cabeza Los racimos hunden sus preciosos d… La amenaza los peligros del cielo Bajar la cabeza como se bajan las… Su prisión negra

Zona conocida para el que empieza… Es una marea errante de muerte tra… Como si hubiera despertado una lám… Y pusiera los sentidos a prueba Es la zona de la concentración de…

Al toque del relámpago Sacad de paseo vuestro espíritu Hacia los acantilados del mundo ex… Tomad la primera palabra que salte… Y lanzaos con ella al infinito.

Así es la clorofila que baña la pa… Que hace de él una planta carnívor… Un monstruo en la soledad Un ángel entre la más pura de las… La esperanza se ha despedido para…

Después de la luz caerán derribado… Los perseguidores del placer. Se había visto una ventana negra j… Con Islas fosforescentes Todos ellas apuntaban al hígado.

El niño en la espada el párpado de… Sostiene la mirada y desciende al… Cuando el alma despojada de sus es… Se siente redimido en el beso de l… Llegar a los pantanos solitarios

Con el tiempo no quedará de los ge… El hombre y la mujer vivirán en es… Será la más absoluta de las alianz… Sin temores sin la pesadez del alm… Sin la angustia que deprime el ros…

Cortar un amor como se corta un de… O partir en fuga negra Con aguas negras y un viento negro Ya sin el corazón de un cielo irri… A duras penas inmóvil

Sea como la obsidiana lanzada a la… Esa angustia que pesa semejante al… Sea como yo O como la noche esencial A la que me someto.

Caído el hombre por su herida en e… Giraba el precioso dedo En tan dulces movimientos Que la mujer iba desnudando Sus senos luminosos