Yermos Desolados
Estilo Emily Brontë
En páramos salvajes, bajo cielos grises,
mi alma vaga libre, indómita y fiera.
El viento susurra secretos ancestrales,
mientras la niebla envuelve la pradera.
Solitaria camino entre brezos y helechos,
mi corazón palpita al ritmo de la tierra.
Las rocas guardan silencio, testigos eternos,
de pasiones que arden y jamás se entierran.
La lluvia golpea mi rostro con furia,
mas no logra apagar el fuego interior.
En cada gota siento la fuerza de la vida,
y en cada trueno, el eco de un amor.
Que el mundo me juzgue tosca y agreste,
poco me importa su falsa opinión.
Pues en la naturaleza encuentro mi hogar,
y en la libertad, mi única religión.
Como el halcón que surca los cielos,
mi espíritu anhela romper las cadenas.
En este yermo desolado hallo consuelo,
lejos del mundanal ruido y sus penas.
