No hay cosa más enfadosa que un amigo preguntón. Dijérase que es razón, pero es carga pesarosa. Siempre pregunta ociosa
Soy una hoja que danza en el vient… un susurro que se pierde en la bri… una chispa de luz que en un moment… se agita, crepita y de pronto se i… Soy una gota en la inmensa cascada…
En la tumba oscura, donde el silen… Yace Lázaro, envuelto en mortal d… Pero una voz resuena, llena de pod… ‘Lázaro, levántate y anda, ¡tu hor… Con paso tambaleante, Lázaro emer…
Ámame como el cielo ama a la tierr… con devoción inmensa e inolvidable… Ámame como el río sigue su senda, fluyendo siempre, constante e impa… Ámame como el ave ama su nido,
Surcando el cielo azul, cual regia… La luna sonrosada, desposada, Desnuda y soñolienta alumbra el dí… Envuelta en sus fulgores deslumbra… Su cuerpo alabastrino, ardiente ll…
Oh, dulce llegada, luz renovada, tu canto florece en el aire, vibrante de vida, esperanza sembra… despiertas al mundo en tu suave ba… Los ríos murmuran con alegría,
Versos que se alzan, Palabras que se entrelazan, Creando un mundo de sonidos y colo… La poesía, un lienzo vivo, Donde el lenguaje se transforma,
Si en tu garganta un nudo atorment… Impidiendo el dolor expresar, Cuando la sal del llanto te lament… Cantando triste un tierno pesar, Entonces sentirás cada jornada
En la sombra de la luna, canto un amor perdido, las olas susurran su nombre, un eco en mi corazón herido. Sus ojos, estrellas que brillan,
El aguijón del recuerdo, punzante, atraviesa el corazón con su lance. Momentos pasados, dulces o amargos… vuelven a la memoria con descargos… Aquellos días felices, llenos de l…
En la brisa del atardecer, fugaces momentos se mecen. Suspiros que llegan a florecer, instantes que la vida ofrece. Destellos de luz que se escapan,
Querida Olga, Otra noche más en esta celda de so… Las paredes se cierran a mi alrede… Sofocando mi espíritu, robando mi… Pero aún en la oscuridad puedo sen…
En la tierra donde el hambre acech… Donde la alegría se marchita, Alzamos nuestras voces con fuerza, Para defender lo que nos pertenece… El pan, sustento de nuestros cuerp…
En el país donde el río susurra, bajo un cielo de espejos y trinos, un pianista teje melodías, sus dedos danzan sobre las teclas… Las notas flotan como hojas de sau…
En un rincón donde nadie la ve, vive una luz que no sabe brillar, no necesita espejos ni piel, solo su esencia para cantar. No lleva joyas ni un gran respland…