Tu boca es río que en mi ser se enreda,
fuente de miel donde bebo la calma,
es labio y sombra, refugio del alma,
puerta que abrí sin saber su vereda.
En cada beso nace el universo,
como un incendio que en mi pecho habita,
y su fulgor, ardiente y exquisita,
convierte en canto el amor más diverso.
Tu boca calla, pero en su latido
se esconden versos que nunca se acaban,
y al nombrarla, me pierdo en su sonido.
Boca que duele, boca que embriaga,
en su sabor encuentro lo perdido,
bajo su abrazo el tiempo naufraga.