Pino Escocés
Eres estampa de noble altanería,
tronco rojizo, eterno en la montaña,
raíces fuertes donde el suelo baña
la bruma fría de la lejanía.
Tus verdes ramas tejen melodía,
susurros que el invierno siempre extraña,
vigía eterno donde el tiempo empaña
las huellas mudas de su geometría.
Guardas secretos del aire viajero,
la nieve adorna tu figura erguida,
y el sol te besa con su ardor primero.
Bajo tu sombra se refugia la vida,
tu aroma evoca el bosque verdadero,
pino inmortal, canción nunca perdida.
