**Lo ineludible**
Quedarse quieto, esperar que nada ocurra,
Como iluso que el tiempo jamás transcurra.
El fatal destino ya es parte del ser,
El hombre mortal, es nuestro padecer.
Frente al asombro del fugaz momento,
La poesía, un engaño, un lamento.
Inspirar, solo el respirar profundo,
Infinito, efímero, trance fecundo.
En pentagramas de verso profundo,
La vida trémula, el llanto en segundo.
Como baladas que cuentan lo fugaz,
Cada línea un himno a nuestro solaz.
Aunque el tiempo se agote, el amor no expira,
En cada verso un soplo que nos vira.
Complejas emociones, dulce y amarga,
Cantamos con la vida, aunque sea larga.
A través de la lira, la inspiración,
Gracias al amor, la eternidad está unida al pregón.
Porque en cada momento, aunque pasajero,
Encontramos el sentido en lo eterno, lo verdadero.
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Amor
Dolor
Admiracion
