Ardiente llama que en mi pecho enc… voraz incendio que mi ser devora, ¿hasta cuándo, cruel, mi vida impl… alivio a los tormentos que me vend… Tu desdén, cual glacial ventisca,…
Quisiera ser el aire que acaricia… Eres el fuego que enciende mi ser, Róbame el aliento con tu dulce mie… Inundando mis días de puro placer. Destellos de amor brillan en tu mi…
El tiempo pasa y deja su lamento, sus huellas son de sombras y desve… mas siempre queda, firme, contra e… el nombre que elevó su afán al cie… No es vano aquel que siembra el fu…
Bajo el manto de la noche, donde brillan luces lejanas, susurros del alma resuenan, en la danza de las mañanas. Las estrellas, testigos callados,
La amistad, cual pichón leve, recién nacido y frágil, requiere un cuidado ágil, y un cariño que la eleve. Con ternura se renueve,
La Muerte, muy astuta, con sotana y gran sermón, llegó con su risa bruta a dar la extrema unción. El enfermo la miraba,
Fue un instante, fugaz como la bri… un destello que al tiempo desafía, como el agua que escapa en su osad… dejando atrás la huella que eterni… Nos miramos sin más, sin prisa o l…
Oh, Father, Almighty and Supreme… Your love and grace, a guiding bea… For all your blessings, we give th… Your presence fills our hearts wit… You watch over us with tender care…
Si sientes un dolor que espanta Que te inflige dolor y lamento, Lágrimas descienden como cascadas, Que en el alma la tristeza canta. El dolor suspira, con voces quebra…
Llamé a la noche callada, tejida en sombras y estrellas, donde el amor se desliza y canta en almas inquietas. Surqué los vientos del tiempo,
En este vasto mundo de quimeras, Donde la realidad se torna sueño, Luchan los hombres con ardor y emp… Buscando en la ilusión sus primave… Cual hidalgos que en brazos de la…
Oh, Hugo Emilio, cantor de la ese… las alturas te honran en su paz di… el viento te replica con fiel tern… y la rima te rima en dulce esquina… La musa te ama en su entrega segur…
Bajo la luz de un París inquieto, te encontró su mirada voraz, tú, la joven de risa en secreto, él, un genio de sombra y de paz. Tu rostro de líneas tan puras,
Eres mi diosa Afrodita, nacida de la espuma del mar, con tu belleza infinita, mi corazón haces vibrar. Tus ojos, dos luceros,
Mi pluma canta alegre sobre el bla… bordando melodías con tinta y emoc… susurra entre las hojas un mundo t… que todo se transforma en pura ins… La risa va danzando en ritmos musi…