Culto a mi amada desde el Corazón.
Yo te amo, vida mía, con todo mi corazón,
Con toda la ardiente fuerza de mi alma enamorada;
Tú eres la luz que alumbra mi oscura existencia,
La estrella que guía mi ruta desolada.
Tú eres la brisa suave que mece mis sueños,
El aroma que embriaga mi espíritu doliente;
Tú eres el néctar puro que endulza mis angustias,
La miel que refresca mi labio sediente.
Tú eres la música grata que alivia mis penas,
El canto armonioso que calma mi aflicción;
Tú eres el fuego interno que inflama mi pecho,
La llama que aviva mi ardiente pasión.
Tú eres la imagen bella que llena mi mente,
La imagen adorada que nunca se borrará;
Tú eres la dicha suprema que anhela mi alma,
La dicha que sin ti jamás alcanzaré.
Por eso, vida mía, con todo mi corazón
Te rindo mi culto, mi amor, mi lealtad;
Tú eres mi único bien, mi único anhelo,
¡Mi gloria, mi cielo, mi vida, mi eternidad!
