#EscritoresUruguayos
La noche / 1… No consigo dormir. Tengo una muje… La noche / 2… Arránqueme, Señora, las ropas y l… La noche / 3…
Habitamos un mundo gobernado por el miedo, el miedo manda, el poder come miedo, ¿qué sería del poder sin el miedo? Sin el miedo que el propio poder genera para perpetuarse. Los que trab...
Los funcionarios, no funcionan. Los políticos hablan, pero no dice… Los votantes votan, pero no eligen… Los medios de información desinfor… Los centros de enseñanza, enseñan…
Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la b...
* No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta. * ¿Hasta cuándo los países latino...
Ellos se conocieron por casualidad, que es como se suelen encontrar los grandes amores, casi siempre por casualidad, por una llamada equivocada, por un encuentro fortuito. A ellos lo qu...
¿Qué tal si deliramos por un ratito? ¿Qué tal si clavamos los ojos más allá de la infamia para adivinar otro mundo posible? El aire estará limpio de todo veneno que no provenga de los m...
Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la vuelta contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un m...
No nos da risa el amor cuando llega a lo más hondo de su viaje, a lo más alto de su vuelo: en lo más hondo, en lo más alto, nos arranca gemidos y quejidos, voces del dolor, aunque sea j...
Qué tal si deliramos por un ratito qué tal si clavamos los ojos más a… para adivinar otro mundo posible El aire estará limpio de todo vene… de los miedos humanos y de las hum…
Pobres, lo que se dice pobres, son los que no tienen tiempo para… Pobres, lo que se dice pobres,
Los cuentacuentos, los cantacuentos, solo puede contar mientras la niev… Así manda la tradición. Los indios del norte de América
Esa mujer es una casa secreta. En sus rincones, guarda voces y es… En las noches de invierno, humea. Quien en ella entra, dicen, nunca… Yo atravieso el hondo foso que la…
Diego no conocía la mar. El padre, Santiago Kovadloff, lo llevó a descubrirla. Ella, la mar, estaba más allá de los altos médanos, esperando. Cuando el niño y su padre alcanzaron por fi...