#Cubanos #Habaneros #Mujeres #PremioCervantes #SigloXX #1953 #PoemasSinNombre
Este espejo colgado a la pared, donde a veces me miro de pasada... es un estanque muerto que han traí… a la casa. Cadáver de un estanque es el espej…
Está bien lo que está: Sé que todo está bien. Sé el Nexo. Y la Razón. Y hasta el Designio.
Hay en ti la fatiga de un ala much…
Ayer quise subir a la montaña, y el cuerpo dijo no. Hoy quise ver el mar, bajar hasta la rada brilladora, y el cuerpo dijo no. Estoy desconcertada ante esta resistencia obscura, esta in...
Hasta los lirios están sujetos a t…
En la casa vacía han florecido roj…
He dormido al amor en su cuna de n…
se rompa el hilo... A pesar de que todavía no las veo, inmersas como están en la tiniebla, yo creo que son muchas, y creo también que algunas son hermosas y dignas de vivir. concebido,...
Amado mío, dame la rosa de ayer o…
Tú eres un espejismo en mi vía. Tú eres una mentira de agua y sombra en el desierto. Te miran mis ojos y no creen en ti. No estás en mi horizonte, no brill…
Cuando la ola viene impetuosa sobr…
¿En la vara de Moisés, el de la cabeza flamígera, o en aquella humilde, reseca piedra del desierto? ¿O estaba, desde antes, en la enfebrecida sed, capaz de fecundar arroyos en cada pied...
Acaso en esta primavera no florezc…
Vienes por fin a mí, tal como eras, con tu emoción antigua y tu rosa intacta, Lázaro rezagado, ajeno al fuego de la espera, olvidado de desintegrarse, mientras se hacía polvo, ceniza, l...
El pequeño contrahecho conoce todas las piedras del jardín; las ha sentido en sus rodillas y entre sus manos ya escamosas de humano reptil.