POESÍA JAPONESA
Café tan negro como los ojos de él. ¿Por qué te fuiste? Quizás te vuelva a ver y oiga tu voz.
El amor no se mide por cuantas veces te dice te amo, se mide en los destellos dorados de tu mirada. Y da igual que seamos tan diferent…
Máquina rosa bordaba las cortinas las flores miran Pagoda sola entre árboles y flores
No sé que me pasa, pero la vida se me va en la mesa sentada la mente me abrasa. La televisión me da hastío
Aire, aire es lo que yo necesito, pulmones rojos y vivos es lo que yo necesito. Yo solo quiero respirar, eso solo,… Ese gesto humilde, es lo que yo ne…
El amor se desdobla entre el día y la noche tu amor se ha convertido en el temor de unos celos perverso… Me gustaría que me amaras
¿Quieres que te diga la verdad? solo eres un mojigato lleno de mie… eres un hombre asustado que solo vive en la oscuridad. Ya huele mal la situación
No te guardes los “Te amo”, no escondas los “Te quiero”, no calles un “Te extraño”, no niegues un “Te espero” No mates un abrazo,
Hoy te vi, paseando por Madrid, el agua del lago borboteó en mi si… la emoción me embargó los ojos, y es que me enamoré de ti de tal manera que ni la tierra rom…
Tus muslos fuertes como las column… tus pechos de pezones rosáceos; de mármol blanco su piel rezuman leche que como un riachuelo recorren
Verja azulada se me para el tiempo entre esas flores Cabello negro cara de porcelana
En noche oscura, entre tierra y el agua, Salta la rana. En el panel se afanan las abejas.
Hace días que no abrazo las palabras, días que las letras están encerradas en mí maltrecha existencia.
Eres mi afrodisiaco el “si” de mi margarita mi sonrisa vertical el deseo hecho carne. Tu piel suave
Estación Con qué alegría se viste de colores la bella primavera las margaritas