Salieron mariposas
de mi cuerpo.
Llevaban soledad,
falta de pasión
un rato corto de amor
Y un adiós.
En la cama vacía
siento mi cuerpo estremecido
alas delicadas esparcidas en la sábana
mariposas muertas.
Él se fue
yo no volveré a pensar en esta historia rota
llevaré el corazón en la mano
sentiré su latido
cogeré un camino libre de piedras
para no tropezar de nuevo
coseré con aguja de plata mis heridas
andaré, andaré lejos, mi luz será
una luciérnaga en la noche.
Me desvaneceré como humo,
viviré a golpe de sonrisa
olvidaré que ella estaba en tu cama.
Me pregunto cómo,
me pregunto por qué,
solo puedo ver un cofre
con unas fotografías
unas cartas amarillentas
un camafeo sin fotografías
y un dolor escondido.