POESÍA JAPONESA
Me senté en su regazo la muerte, me abrazo fuerte me recosté en ella me hizo mirarla y me besó devoró mis labios
Estoy en casa esperándote dime: ¿vendrás sin tener que pagar… Hoy en día todo se cobra, todo se… pero solo tengo mis demonios correteando entre la nieve
Te he extrañado en este gran silencio, entre tu y yo. Suena aquella canción, no hablamos nada,
Flores arropan la madre tierra, fuerte, nos da la vida center Bosque, aromado
Huele a tierra húmeda la lluvia ha caído intensa, un trueno a sonado como si mil tambores, tocaran en mi habitación
LA NOCHE ME SABE AMARGA La vida que se transforma, se deforma entre calles empedradas con el dolor ajeno. Noches que se estrujan
Tu ya no estabas un encaje de olvido rodeó mi alma. Llovizna fina un hilo de nostalgia
Hoy en el bar me miraste quizás te creas muy importante, es que no me ves bien, mira mis piernas envueltas en medi… que me quedan como un guante
Verja azulada se me para el tiempo entre esas flores Cabello negro cara de porcelana
No toques mi corazón, porque yo no quiero, aléjate como las olas se alejan de la arena. Manos de terciopelo,
Corre el riachuelo con esa libertad que da la vida. Cantaba el pájaro canciones de pasión,
Mi canción en llamas solo mía, clamando por saciar este hambre, que me mata en esta humedad del bosque,
Hoy puse yo las calles de Granada quiero comprar un reloj para regal… así podrás controlar mi tiempo el latido de mi corazón y la calor que me entra cuando pie…
La noche oscura sin estrellas, y la luna escondida tras las nubes, daba impresión desde aquel callejón, la parte posterior de un restaurante donde ella acababa de terminar su trabajo. A...
Con el alma en vilo al verte por la carretera mi corazón cosido con hilo para que no se salga y muera,
