Vuelve ya Vicente yo te invoco Altazor es mi nombre y mi retrato Que del brinco despeñado tuyo No ha parado el eco de tus labios Se Vicente no eres presa
Se abren –pintura al óleo– Las sombras de seda que rodean Un ojo abierto se rinde A días nuevos y al sueño Árboles se agrupan en bosques
Porque fui un hombre Que en tu miel Probo veneno, Y deje mi cuerpo caer En el espiral de tu adicción.
Lo único que recuerdo, aparte de un súbito golpe, es a aquella mujer que me distrajo, ella que jalo mi mente por completo; después de eso sólo luces y blancos con brotes carmín, gritos ...
El día de hoy Como cualquier otro Se mezcla en la consciencia Y llueve Como en otros grises
Quien crea del contorno una flor Para en consuelo imaginar su aroma Y desvanecer por segundos La soledad que le agobia Quien responde al propio eco
De aquel pobre orgullo Que crecer se dio en mi pecho, Aquel que acerque con mis dos mano… A escuchar su respirar primero, Ya sólo escucho el silbido
Cultivo un jardín pero nada crece, Llore en sus surcos mi decepción. Te di una rosa de mis sueños Que en mi jardín, jamás nació. Cultive un rosal,
No me atrevo a tocarte Pues dentro llevo una mancha Que a tu ser inmaculado, No debe extender, Por eso no me ves acercarme,
No entiendo como he podido enamora… De manera tan completa De una forma tan perdida No entiendo como es que mi alma En sincronía con mi corazón
Será la forma en que los sueños, Por ser nuestros se entrelazan; O será el aire que nos llama Y por deseo mismo Nos libera.
Flor de árida planicie que a falta de cariño, te piensas indeseada. No sabes, flor hermosa, como de ti brota
El amor es nuestro, Es en el abrazo al que perteneces, Que incluso en el roce de lágrimas… Existe calor en el ritmo de nuestr… (Aferra el alma en el sentimiento)
Canta un eco al vacío, En largos pasillos su ruido imprim… Y a la sombra fría, El llanto exige. Cálida mano,
Si solo buscas mis palabras, ¿De qué sirvo? ¿Qué es todo aquello que queda, Después de obtener lo que esperaba… Mira bien,