Juré no volver a sentir algo por un hombre pero llegó él.
Llegó él con su forma tan positiva de hacer las cosas.
Llegó él con su amor por la vida, cuando yo casi olvidaba como es que se respira.
Llegó junto con un huracán de emociones y mensajes graciosos.
Llegó él y con él venían todas esas palabras tan cursis que hoy salen de mi boca sin problema.
Puedo sentir tranquilidad al imaginarme recostada en su pecho.
Veo las estrellas mientras cierro mis ojos y beso sus labios. La distancia no cuenta.
Le tengo, me tiene y esa sensación de libertad nos envuelve.
Con el venían las respuestas a tantas preguntas que vivieron por largo tiempo en mi mente, Que si es real eso de que cada cual tiene un alma gemela para si? O es acaso otro mito igual que las sirenas? Que es el destino? Será real?
Claro que creo es real!
Hay quienes dicen es un invento más de aquellos que gustan de la poesia, que utilizan semejante estupidez para inventarse una que otra línea cada noche. Pero...
El problema es de las personas, que buscan con la mirada, sin percatarse de que el Fragmento de su espíritu solo puede verse con el corazón.