#EscritoresMexicanos
Escucho a Bach consciente de que esa piel que te… es la misma que ahora me circunda que me llena de lirios navegantes, porque no somos dos
No la noche. Ni el telegrama urgente. Ni las ojeras grises. Ni las plazas en llamas. El amor es un lirio
Dejaste de contar con la sorpresa o sin duda fue ella quien dejó de asomarse por los huecos del tiempo. Dejaste de atisbar a la sorpresa
Amaso el mismo pan todas las noche… mas no lo desayuno al día siguient… su levadura carece de energía para llevarme al sitio de tus ojos… El pan toca el misterio
Como te decía, mi pequeña Mariana… Al único que no hemos podido inter… ¿Se refería tal vez a que los sueñ… Eso, mi querida Mariana, presient…
La luna vieja reflejada sobre el p… yendo a pasear de la mano entre lo… De la mano del viento en las plega… entre el negro horizonte de los ca… La luna yendo a hablar, a interrog…
Es que alguna mañana despertamos, y ya no padecemos por lo que tanto ha muerto. Nos vamos poco a poco cubriendo en polvo de oro
En mi aposento tengo un prisionero que no soy yo, que no eres tú, que no es aquel que nos rompió los… por fabricar collares.
Eres solo el reflejo del reflejo de otro espejo que está dentro de tí. Y el más oculto de tus espejos
Y no regreses nunca por el mismo camino. Espera que los vientos remuevan las montañas y que la selva cambie
Has bajado el telón porque una man… de duda ensombreció los escenarios… Un héroe mutilado violaba los cadá… y las hembras mojaban lentamente sus cabelleras en el mar.
¿Serás la música mañana o serás simplemente el fugitivo huésped de la canción? ¿Serás el esencial y adormecido lirio de la palabra?
Lo que la mar arroja no son únicamente iniquidades. de cuando en cuando el tiempo se amotina para corporeizar nuestros ensueños…
Tú que estabas, estás y vas conmig… por la vuelta inconclusa de las ho… cuéntame qué tan hondo vacío el de… ¡y en la red protectora qué silenc… Que silenciosa urdimbre de arañas…
Y si supieras sólo la mitad de lo que le he contado hoy a mi a… ya no protegerías mis pupilas del gusano del mundo, ni serpearías entre largas sombras