Momio,
sujétate de la brocha.
Momio,
que me llevo la escalera.
Estaba el momio encumbrado
arriba del pueblo entero
pero entonces nos unimos
y ahí se vino el momio al suelo.
Y en esta caída loca
buscando su salvación
inventaron la Tribuna,
tribuna de la traición.
Qué tribuna es la Tribuna,
la tribuna de la infamia.
Qué montoncito de escoria
en la historia de la Patria.
Detrás de esto hay una envidia,
una envidia solapada
sí, la mano tenebrosa
de una sutil embajada.
Tú no quiere’a Chile
como yo lo quiero,
tú no quiere’a Chile
como yo.