Pedro Calderón de la Barca (Madrid, 17 de enero de 1600 - 25 de mayo de 1681) fue un escritor, dramaturgo y sacerdote español, miembro de la Venerable Congregación de Presbíteros Seculares Naturales de Madrid San Pedro Apóstol y caballero de la Orden de Santiago, conocido fundamentalmente por ser uno de los más insignes literatos barrocos del Siglo de Oro, en especial por su teatro.
Pedro Calderón de la Barca (Madrid, 17 de enero de 1600 - 25 de mayo de 1681) fue un escritor, dramaturgo y sacerdote español, miembro de la Venerable Congregación de Presbíteros Seculares Naturales de Madrid San Pedro Apóstol y caballero de la Orden de Santiago, conocido fundamentalmente por ser uno de los más insignes literatos barrocos del Siglo de Oro, en especial por su teatro.
Poeta cortesano y soldado, en 1651 se ordenó sacerdote. Su teatro, basado en el de Lope de Vega, introduce importantes modificaciones: suprime escenas innecesarias y reduce las secundarias; subordina los personajes a uno central; acentúa las ideas monárquicas y el tema del honor. La angustia barroca de la existencia, junto con los problemas teológicos, delinean los autos sacramentales, que requieren de gran aparato escénico y donde Calderón alcanzó su máximo lirismo. Su lenguaje es la culminación del culteranismo y su riqueza expresiva posee elementos del conceptismo intelectual, como se evidencia en su obra La vida es sueño (1635).
más pues qué ya cuando sol oh yo cielo para porque tan tanto tierra hoy luz dos aunque día sin bien muerte entre este sólo viento como voz os flores esta nace quien vida quién tú otro aquí señor amor cielos hombre tiempo mar mas tanta tus tengo todo vez mundo ser vos mayor piedad llanto así apenas noche fuego está hasta vuestra otra siendo menos mal rayos estrellas mejor donde dolor libertad ay clarín rosaura morir siempre aun pluma desde da soy he ahora aquel gloria dulce todos nunca habrá ojos ver habéis vio fin suelo celo pecho pero ave delito vuestro tantos mío nise isidro nuestro sido hay vive aquella bellas mira diré él fortuna rigor sino mí luego madrid lágrimas sangre hace dios dan vivo honor labrador españa santo viva oro alma todas campo süave cada dichoso humano sí parte suerte corona valor rompa antes uno hizo cómo mismo mayores cuyo cuanto muere mil pena monte vivir ofrece contra centro sabe cuna nacer bruto envidia poder número silencio aquél afecto también sufren puesto bella hermosura hermosa veces primero cuándo luminoso celestial ángeles edad va tiene ella tantas sueña belleza flor tener ondas majestad razón cristal brazos pudo sepulcro puede aún justicia nacido quisiera nacieron demás teniendo pez pobre penas admiración segismundo glorias cinco están daño murió ninguna tal noble planta cuya olvido nombre felipe esfera entonces mano obediente fama campos encierra divino grave torpe nieve quejas parece rey sueño estrella dice suma deja humana frío temor di muerto consuelo estaba unas alguna apurar nací pedazos hombres viendo fuera sabio triste desdichas vano juicio estos nobleza advierte quiso sola hado dura cualquier tres vas paso rosa fuerza beldad efecto muro deidad dueño principio llegó volando neptuno ellos luces veloz acento oriente suspiros años sujeto sentimiento vuestros vuelo carmelo resplandores viven dellas siglo fueron rayo llama gusto después pie éste edificio señora tenido haber galas alas gracias respira sobre partes albedrío hecho corazón ley dado voces pies poco solamente das fuerte iba piadoso pasión oído decía mísero sé jesús entréis siervo soldados asalto laurel acción repetido gran diga cuánta misma brío medio carlos sagrado ingenio esplendor liberal sea celos tras decir cuánto tuviste primera quiere allá salvo cuerpo soplo verde colores unos deseos coronado escucha vientos teresa venció castigo soles ignora espíritu sube aliento segundo humilde fuente reyes vuelve divina labradores amorosa despojos tributo fruto fe ves aire nocturnas primavera registro espere mudanza reciba alegría siglos alto esas leyes destino eminente frente vista palacio hielo camino peñas verdad ninguno estado sombra pequeño breve ardores puedo yace saber desvelos dejando corta nido piel docto pincel necesidad enseña laberinto instinto bajel quiebra huida negar privilegio principal eres rústico aves estoy muera rostro sentido infelice monstruo desta fiera soldado cantas confieso infinito salid tendrás favores cantando amores paró pasa nada preciso méritos último iguales adquiere peligro sitio triunfos conseguido modestia mural cívica vallar enemigo facción feliz invicto general gemido dignamente miedo cumplido carrera excede cuidado engaña espada heroica real dígalo maría pedir fernando dosel lustre hablar mudo lucero altiva violencia quedó corra alegre sabiendo tenía partir tristeza dejó amarili niebla parcas castilla hablen lugar algún pecado suyos cordura ventura discurra dama algo hice poeta quiero muero agua glorioso manos oídos polvo gustos hacia atlante albergue niega cuyas variedad conformes eclíptica planeta corre punta esconde virgen jazmín piadosamente vuestras viste apacible felice empresa igualmente verás clavel púrpura filis salve acentos metal vencimientos orgullo segunda ignacio francisco coche ciego esmeraldas eran guerra arrebatado trono nube favor esperanzas ufano canto espigas ángel fatal desengaños gloriosa nuevo obligue dichosa piadosa humildes rompe muda justa rasgos centellas cobran amagos superiores alimentos aquello efímeras padecen fugitiva infiere duración astro mañana fría será término rosas vieron primeros matiz natural confuso arenas nuestra pesar cuenta llorando tienes había horizonte atreve plantas mucho boca llega mirar hemos cenizas ánimo desmayos lejos prisiones vestido pretendo tratáis cometí vosotros naciendo entiendo cometido bastante causa pude ofender castigarme privilegios tuvieron gocé jamás ramillete etéreas salas velocidad negándose calma dibujan manchas signo atrevida crueldad aborto ovas lamas escamas gira midiendo inmensidad capacidad arroyo culebra desata sierpe plata músico celebra abierto llegando volcán etna respeto esto vi siente enojos veo nueva deseo muriendo diera halló respuesta vivía importuna volviendo hallo atento torre obscura mías pueda desdichado españoles encareciendo quedo semblante pagados vil soberbios reportados adorna ruiseñor suspiro respiro perdón dijo conmigo culpas infinitos cruz veros indigno verlo hubiera hierbas clori tormes ardiendo divinos imitando fuiste olvidado labrar estás letargo ayer enemigos menor mortales naturaleza humildad modo desa veas adelante piensas queda jornada parar ciento distancia vale testigo casi tumba bizarría ejército merece virtud lauros arbitrio avisa desengaño hazaña celebrada inmortal menester intento excelentísimo triunfo iguale roma victoria muros lid tuviese triunfal antigüedad campal obsidional ganado roble socorristeis grama césares conseguida sitiado sitiador dignidad quede virtudes ilustre prudente desatando plaza abuelo socorrido merecer decoro monarquía rústica vencer accidente extraño quita envío libro señalada pasó suyo atenta prevenía seguro grande claro juventud lozana curso hilo pendiente oportuno costa perezoso pueblo dicha templo pompas merecen concede providencia allí ataúd morimos nacimos avisos hados letras marte religioso cerviz fío sufrimiento lisonjas llora cabe partida ésta alienta erraba florida puro gallardo postra aplausos conceptos quizá príncipe mérito infalible enojo previene querellas plebe ruega objeto merezca enmudezca vanidad ocaso orilla indicio estriba deshecha desvanecida desmayo extraña desventura cortes despecho rendida despierta acompañaron «aquí velo suceda aura diamante fénix hermosuras cierzo bebió pensión tenga naciera estilo callar lámina poca llegar van vierte tienen mala tuya vamos dio troya codicia cual juzga viejos religión paciencia job duque excelencia haga alta duda habré grandes mucha juntas cuatro gusta largo cosa pierna seré escudero lector damas guisa platón querer salud muchas pálido color arroyos helado baja trato propio hable ignoro negando dolores miembros estéril vivan dulces justamente sentidos hombros barro siete días abrojos samaria pone túmulo gigante opone cerrándole pedazo anochecer amanecer aqueste cultura jardinero venerable rigiendo quemó veloces abrasado eclipse corone casta azucena cuyos aroma recogen logres marchite borre esclavo armas incendios poderes exención libre ...