ESTA NIÑA ES MUJER
La joven colegiala que se asombra del cambio
que han sufrido sus formas en los últimos meses,
descubre exquisiteces mirándose al espejo,
pues ha visto que nacen en su pecho dos senos.
Y su axila de niña se le puebla de lianas,
y se vuelve redonda su cadera delgada;
su voz ahora cobra un matiz que enloquece
al amigo de juegos que le brotan los bozos.
Se sonroja por todo, por un roce fortuito,
por el gesto amoroso del muchacho galante,
que por siempre le ha dado en su trato amigable
una muestra de afectos que transpiran purezas.
Esta niña ha cambiado de manera total:
ya no es niña esta niña, esta niña es mujer.