EL LAZARILLO DE CRISTO
Una imagen del Dios crucificado,
tallada, en la madera, por artista;
incompleta se muestra ante la vista,
queriendo mutilarnos el pecado.
Tiene rota una pierna en un costado,
pero nunca por eso se contrista.
Porque sin mal que su perdón resista,
devuelve la esperanza al congojado.
¡Quien pudiera servirle de muleta,
para que ande mejor su recorrido
cuando va repartiendo pan y vino!
¿Mas cómo, igual al de la fe indiscreta,
se nos puede ocurrir algo atrevido?
¡Servir de lazarillo al Ser Divino