La rosa, la inmarcesible rosa que no canto, la que es peso y fragancia, la del negro jardín en la alta noc… la de cualquier jardín y cualquier…

Alta en el alba se alza la severa faz de metal y melancolía. Un perro se desliza por la acera. Ya no es de noche y no es aún de d… Suárez mira su pueblo y la llanura

¡Cuántas cosas iguales! El jinete… la tradición de espadas, la plata… el piadoso benjuí que sahúma la al… y ese latín venido a menos, el cas… ¡Cuántas cosas distintas! Una mit…

Nadie en la noche indescifrable te… Que yo me pierda entre las negras… Del parque, donde tejen su sistema Propicio a los nostálgicos amores. O al ocio de las tardes, la secret…

El gato blanco y célibe se mira en la lúcida luna del espejo y no puede saber que esa blancura y esos ojos de oro que no ha visto nunca en la casa, son su propia im…

El capricho o imaginación o utopía de la Biblioteca Total incluye ciertos rasgos, que no es difícil confundir con virtudes. Maravilla, en primer lugar, el mucho tiempo que tardaron los ...

Loada sea la misericordia de Quien, ya cumplidos mis setenta… y sellados mis ojos, me salva de la venerada vejez y de las galerías de precisos espe…

Entra la luz y asciendo torpemente de los sueños al sueño compartido y las cosas recobran su debido y esperado lugar y en el presente converge abrumador y vasto el vago

No te habrá de salvar lo que dejar… escrito aquellos que tu miedo impl… no eres los otros y te ves ahora centro del laberinto que tramaron tus pasos. No te salva la agonía

A nadie puede maravillar que el primero de los elementos, el fuego, no abunde en el libro de un hombre de ochenta y tantos años. Una reina, en la hora de su muerte, dice que es fuego y ...