Mi alma yerte, muere cada noche
Al soñarte, despierto en un lecho de flores.
Quiero verte, con un libro, con un pincel.
Un deux trois, un deux trois.
Nunca fui el mar, ni la espuma, ni el nadador
Quizá, la vibración antes de ser sonido.
El tambor de un revólver siendo percutido
Bang, bang, bang
Una zamba que no pude bailar
Un recuerdo, que se llevó el agua.
Ojos cristalinos soltando un hasta nunca.
Bye, bye, bye