#EscritoresEspañoles
Cómo retumba amor, cómo resuena Tu nombre, suelto en flor, por los… Su aletear de palomos azorados Ni el orden de la noche lo serena. Cuánta luna y qué olor de luna lle…
Es hora ya de levantar el vuelo, Corazón, dócil ave migratoria. Se ha terminado tu presente histor… Y otra escribe sus trazos por el c… No hay tiempo de sentir el descons…
Callad, amantes, y ocupad el labio con el beso. No pronunciéis palab… mientras se busca vuestro corazón en otro pecho, jadeante y pobre como el vuestro,
Bajo qué ramas, di, bajo qué ramas De verde olvido y corazón morado La roja danza muerde tus talones Y te estrechan amantes amarillos. Desde qué repentina lontananza
Ahora ya sé que no vendrás, pues m… pasea su vacilante noche por las p… y la ropa puesta a secar es toda n… y una campana agujerea las horas. Ahora ya sé que no vendrás
Viene y se va, caliente de oleaje, Arrastrando su gracia por mi arena… Viene y se va, dejándome la pena Que, por no venir solo, aquí me tr… Viene y se va. Para tan breve via…
Ya nunca más diré: “Todo termina”… Sino: “Sonríe, alma, y comencemos… En nuevas manos pongo nuevos remos Y nuevas torres se alzan de la rui… Otra alegre mañana determina
A trabajos forzados me condena mi corazón, del que te di la llave… No quiero yo tormento que se acabe… y de acero reclamo mi cadena. Ni concibe mi mente mayor pena
Arrebátame, amor, águila esquiva, Mátame a desgarrón y a dentellada, Que tengo ya la queja amordazada Y entre tus garras la intención ca… No finjas más, no ocultes la exces…
Quizá el amor es simplemente esto: Entregar una mano a otras dos mano… Olfatear una dorada nuca Y sentir que otro cuerpo nos respo… El grito y el dolor se pierden, de…
Tenía tanta necesidad de que me am… Que nada más llegar te declaré mi… Te quité luces, puentes y autopist… Ropas artificiales. Y te dejé desnuda, inexistente cas…
Era invierno; llegaste y fue veran… Cuando llegue el verano verdadero, ¿Qué será de nosotros? ¿Quién calentará el aire Más que agosto y que julio?
Me sorprendió el verano traicioner… Lejos de ti, lejos de mí muriendo. Junio, julio y agosto, no os entie… No sé por qué reís mientras me mue… Vengan nieve y granizo, venga ener…
Bebió en tu boca el tiempo enamora… y la cuajó con besos de paloma. Casto tu cuello, sobre el oro asom… tan sólo por el oro acariciado. Lunado el pelo, el corazón lunado,
Nadie mojaba el aire Tanto como mis ojos. Me decías: “¿Trabajas?” Me decías: “¿Ya es la hora del té… Y yo no te decía: “Te amo”;