Y cerré mis ojos,
Y cuando los abrí, ahí estabas tú
rodeada de tu luz,
con gran sonrisa,
y tu sombra que me cobija
y alas blancas.
Como una hermosa pintura de lienzo en anaquel,
con dorados cabellos y de papel tu piel
que acaricia mi sueño,
tu mi angel.
Y cerré mis ojos,
y cuando los abrí
tu rostro desvanecido
sólo en mi mente quedó esculpido,
y así el silencio me escuchó
decir que por siempre te habías ido!