La cama está perdiendo tu olor
Entre tantas noches con amantes sin amor
La culpa, la pena y la vergüenza se diluyen entre las gotas de alcohol
Un mal hábito sale a flote cuando a medias se ilumina el cielo
Y con cada noche que paso bajo un faro distinto
Me doy cuenta que no estoy muerto, sólo perdido, pero eso al final da lo mismo
Y cuándo escucho al cielo quebrarse, lo compadezco
Conozco ese sonido, mi corazón suele hacer uno parecido
Viejo cielo, cuando lloras océanos, quizás no somos tan distintos
Ciego de un amor viejo y prohibido
Nada trae y todo se lleva consigo
Permanezco prisionero de un milagro inconcebido
Aunque arda admitirlo
Curarlo empieza por nombrarlo
No eres amor, sólo mi obsesión