Tersa, alegre, blanca y fina… en apariencia es igual la nieve a la sal marina. Dime tú, Nieves divina, si eres nieve o eres sal.

La marisma se llena del sol de Mayo y recibe a la Virgen bajo su palio. Y el sol la besa

Dos vereítas iguales: ¡cuár de las dos cogeré! si cojo la de mi gusto mi perdisión ha de sé

En el descanso de una jornada, que si fue dura, si fue sangrienta… por ha Victoria fue coronada, junta a la hoguera que los calient… enardecidos y decidores

¡Quién tuviera la zuerte… que tiene la luz que ze apaga y ze quea donde duermes tú!

No pases más por mi casa, que la gente es muy chismosa; yo no paso por la tuya, y estoy allí a todas horas.

Todas las flores der campo ze han puesto er traje de gala, y tambien er zó se ha puesto zu corana de oro y plata. En er cielo está la luna

También después de una pelea hay un cuartito de hora bueno en que el cariño saborea la miel que sale del veneno.

La que quiera como yo, sepa que yo le deseo un novio de lo mejó: torpe o listo, guapo o feo, ¡pero sangre gorda no!

¡Detente aquí, viajero! En estas… nace el que es y será rey de los r… entre pinos gigantes y bravíos, que arrullan su nacer y ásperas br… El reflejo otro tiempo las enseñas…

Ha dicho un célebre autor que en cualquier juego de amór, ya dificil, ya sencillo, como entre a jugar un pillo... ¡el pillo es el ganador!

Tengo en mi huerta una rosa primorosa, rosa de pitiminí; y oye chiquilla preciosa, una cosa,

Guadalquivir El que se ensancha entre olivos y… Cruza pueblos de hechizo y de poes… Y al mar corre a rendirle sus cris…

He de pedir en la Audiencia para todo malhechor, que lo condenen a ausencia que no hay castigo mayor

La acción, en Andalucía Sevilla, calle Alminar. Salita fresca y sombría; menaje de buen pasar; hora, la del mediodía.