#Argentinos #SigloXIX #SigloXX
Jesús de Galilea Para mí no eres Dios, Eres sólo una idea De la que marcho en pos. No me humillo ni ruego
Te argüirán, entre muecas desdeños… los nenitos, de Juan el carpintero… que sería más útil un obrero si ambas manos tuviese habilidosas… Y después de soltar tan graves cos…
Humilde como el voto del creyente, bendito como el angel de mi guarda… tímido, solitario, romancesco, fe y esperanza. II
Ayer te vi... No estabas bajo el… de tu tranquilo hogar ni doblando la frente arrodillada delante del altar, ni reclinando la gentil cabeza
Minarete de alabastro,— Torrecilla de alabastro cimbradora Cual pedúnculo vibrátil, —¡es tu c… Si tu cuello, Hija mía, madre mía, novia mía,
Tú tienes, para mí, todo lo bello que cielo, tierra y corazón abarca… la atracción estelar ¡de esas estr… que atraen como tus lágrimas!; La sinfonía sacra de los seres,
De compasivos canes escoltado, sobre un bloque de piedra de la ví… zozobrante, vencido, en agonía, un siervo del Señor cayó postrado. Cual desgranada, mísera mazorca
Cuando se haga en ti la sombra; cuando apagues tus estrellas; cuando abismes en el fango más hed… más maligno, más innoble, más maca… más de bestia, más de carcel,—
Al clásico del compás establecido para cantar las cosas soberanas: invocando al amor y al buen sentid… musas que deben ser hermanas: sin temer ni a la crítica del ruid…
Si te postran diez veces, te levan… otras diez, otras cien, otras quin… no han de ser tus caídas tan viole… ni tampoco, por ley, han de ser ta… Con el hambre genial con que las p…
Yo soy flor que se marchita al sol de la adversidad, el arbolito en mitad de la llanura infinita. La paloma, pobrecita
Quiero ser las dos niñas de tus oj… las metálicas cuerdas de tu voz, el rubor de tu sien cuando meditas y el origen tenaz de tu rubor. Quiero ser esas manos invisibles
Nocturno canto de amor que ondulas en mis pesares, como en los negros pinares las notas del ruiseñor. Blanco jazmín entre tules
Esta vida mendaz es un estrado donde todo es estólido y fingido, donde cada anfitrión guarda escond… su verdadero ser tras el tocado: No digas tu verdad ni al más amado…
Como una sola estrella no es el ci… ni una gota que salta, el Océano, ni una falange rígida, la mano, ni una brizna de paja, el santo su… tu gimnasia de jaula no es el vuel…