(2014)
¡Oh dicha plena aunque mitad parezca!
Un prodigio es tu belleza pero le he cantado poco. Tu cuerpo, Reina y Alteza, más que cantarlo, lo toco. He de mirar tus encantos
En casa soy bibliotecario, cargo que es por consigna; me rodean lib… como edificios yertos, algo auster… se alojan mil amigos en letargo. Biblioteca salvada de un embargo
La mujer del cuadro me mira con seductores ojos fijos. Adquirí la fotografía en “El lugar de los hallazgos”, el sitio incomparable donde uno se adentra con la morbosa inquietud de no sa...
De un jardín oriental un par de ro… sus tallos enlazaron como un nudo. Fue unión de flor a flor, no abraz… fue enredo de dos formas caprichos… ¿Prodigio de las causas azarosas?
Si un amigo traiciona se nos muere un hermano elegido en nuestro afec… es con sorpresa descubrir abyecto a un ser de luz que sin embargo hi… Fulgor que por brillar maldad requ…
Sabrá Mujer que por azar soy suyo que en el pasado presentida existe su dulce voz, esa mirada triste, carácter fuerte, femenino orgullo. Le adiviné, le pertenezco, arguyo
Transcurren las horas y es que no… y mi persistente memoria te evoca: Tu cuerpo inocente, tus manos, tu… Ya no volveremos a vernos jamás. Toda nuestra dicha es ayer, quedó…
Tu corazón: joya irrepetible fugada en siderales eventos, refugiada en tu pecho cálido.
Me envilezco, me aterro de mi mismo, de la barbarie que habita escondid… agazapada, riente en arrugas trincheras de mi cara.
Ella, con su mirada fija, su media sonrisa, sus palabras escasas que apenas insinúan su pensamiento. Ella que deja a mi imaginación tormentosa armar las piezas que me faltan para descif...
Amiga que compartes el calor de mi… Nada hay como mis brazos para acun… Apoyadas tus sienes, descansando e… Ves transcurrir las horas por algú… Es el tiempo dormido y el amor ya…
Tierna infancia de anhelo en que c… en seres luminosos y de encanto, que buscaba un fulgor, un eco, un… un rastro en mi alienada fantasía. Los años de mi búsqueda vacía
Hemos traído la casa a habitar este sitio de dos metros… Manos amadas, tuyas laceradas y fuertes de Madre compasiva
Hay algo que avecina una implacable soledad sin fecha. El alma lo adivina, la sombra gime en su pasión, deshe… Y en la hora vespertina
Está herida de notas mi guitarra y herida por las armas, por el fue… Mi camino es cantar y canto y lleg… desnudo, sin lugar ni hojas de par… Este mundo en sus penas se desgarr…