Alberto Lamar Schweyer fue un escritor precoz. Ya en 1918 —con solo dieciséis años—, ingresó en la redacción del Heraldo de Cuba y en 1920 comienza a asistir a la tertulia del café Martí junto a otros intelectuales entre los que se encontraba Rubén Martínez Villena, Enrique Serpa, Enrique Núñez Olano, Juan Marinello, José María Uncal y Julio Sigüenza —los dos últimos, españoles. Lamar Schweyer colaboró en El Fígaro (1921-1929) con treinta y cinco textos, escribió en El Mundo (alrededor de 1922-1923); en 1924 pasó a El Sol, periódico comprado por Machado para su propaganda electoral. En el propio año dio a la luz diez artículos y llegó a ser Subdirector. Fue uno de los redactores y directores de la revista de izquierdas Venezuela Libre (1925), que se publicaba en La Habana y estuvo entre los seis redactores de la Revista Parlamentaria de Cuba.
Alberto Lamar Schweyer fue un escritor precoz. Ya en 1918 —con solo dieciséis años—, ingresó en la redacción del Heraldo de Cuba y en 1920 comienza a asistir a la tertulia del café Martí junto a otros intelectuales entre los que se encontraba Rubén Martínez Villena, Enrique Serpa, Enrique Núñez Olano, Juan Marinello, José María Uncal y Julio Sigüenza —los dos últimos, españoles. Lamar Schweyer colaboró en El Fígaro (1921-1929) con treinta y cinco textos, escribió en El Mundo (alrededor de 1922-1923); en 1924 pasó a El Sol, periódico comprado por Machado para su propaganda electoral. En el propio año dio a la luz diez artículos y llegó a ser Subdirector. Fue uno de los redactores y directores de la revista de izquierdas Venezuela Libre (1925), que se publicaba en La Habana y estuvo entre los seis redactores de la Revista Parlamentaria de Cuba.
La figura de Alberto Lamar Schweyer suele ser olvidada o ignorada por razones ya establecidas, asociadas al proceso de desarrollo del minorismo habanero. La selección en la distancia histórica lo estigmatiza como "el traidor de los minoristas" —llamado así por Alejo Carpentier en el texto "Un ascenso de medio siglo".
Miembro del Grupo Minorista desde la Protesta de los Trece, rompió con el mismo en 1927, por diferencias ideológicas con el resto de los integrantes. Su salida se vislumbró cuando El Fígaro, el 6 de febrero de 1927 , publicó un fragmento del libro Biología de la democracia, texto que apoyaba teóricamente a las dictaduras y con el cual le daba un espaldarazo a la prórroga de poderes de Machado, y por la misiva que le envió al destacado periodista Ramón Vasconcelos, que publicó El País el 4 de mayo de 1927; estos hechos motivaron en gran medida la "Declaración" de 1927, que reprodujo la revista Carteles el 22 de mayo de 1927 y la revista Social en junio del mismo año. En este número aparece el resultado de un incidente personal que causó la carta insultante de Lamar Schweyer dirigida a Vasconcelos.
Ecured – https://www.ecured.cu/Alberto_Lamar_Schweyer