Amplificación,
trinos, jora y melodías,
talento, calma y alegría,
vuelan bellas armonías,
retablos descansan en la ganadería.
El arco iris refleja rayos,
diciembres festivos sin cesar;
virgenes del sol,
toman tu nombre en honor.
El silencio siente la mirada,
carnavales en el interior,
caminos, aves y artesanía,
bellas mariposas esparcen fulgor.
Zarzuelas inminentes,
trastes, cuerdas, amanecer,
el viento roza el rostro,
maestro en Huayno y Yaraví.
Azul, cielo, humadera,
toril, bravuras en espera;
sigilosa la mirada placentera,
los cielos tu nombre espera.
Ayacucho es tu lar,
viento suave primaveral,
las golondrinas trinan tu nombre
frente a tu casa y en el caudal.
Diapasón, cajón, encanto;
familia y canto al adiós...
adiós al pueblo que te vio,
que te quiere y te dio.