Sírvame la ópera Madame Butterfly
término medio
con salsa de maní picante
y un poco de gobierno español
con trocitos de invierno.
Después me trae a un soldado de la Primera Brigada de Artillería
en completo estado de ebriedad
un par de mirtos
la erupción del Krakatoa
y el servicio postal a la luz de la filosofía.
De beber
algo que no desmaye en su difícil pero honrosa tarea.
Los postres se los pediré después.
Ah
y palillos de dientes.