Siéntate a la mesa. Bebe un vaso de agua. Saborea cada trago.

«Esta luz, esta luz alicantina...», dije, llevándome a la boca el bote de cerveza. «Sí.» Era un 124 blanco, ¿no te a… La brisa

Me llama. Está borracho. Un poco borracho; la lengua le patina, y me imagino su babosa, su estúpida sonrisa.

Hundo la cuchara en la blanda firmeza del yogur y me lo como, lentamente, de pie,… de la nevera abierta. Paladeo su frescor gratificante,

Otra maldita tarde de domingo, una de esas tardes que algún día escogeré para colgarme del último clavo ardiendo

La vieja terminó por fin de volver… Se levantaba la falda y exhibía el… le pedía que se lo chupara al maitre. Se llamaba Linda. Tenía

pillada en un círculo de pesadilla y pescadilla que se masca la cola que no sabe ni cómo empezó los niños

Tu padre se está metiendo coca, tu… no te deja estar, y ahora que por… desechar otros vicios que no fuera… el condenado tabaco y el café. Llegas a casa, enciendes la T.V.

Me hablaba del cielo de Esmirna, de las doradas cúpulas que alumbra la tarde veneciana, del aire perfumado y cómplice de c…

Mi hija (año y medio) procuramos q… en los momentos buenos o mejores: cuando nos abrazamos y besamos, cuando las cosas discurren con lis… cuando no hay gritos ni vajilla am…

Tú sí tú no tú sí tú no tú sí

Suena el teléfono. Manolo. Me com… que le han dejado un ojo como un p… En una fiesta —cosas que ocurren,… cuando uno se divierte. Algo que, como ya se sabe, no gusta dem…

Pedro Salinas dice en un poema que no quiere dejar de sentir el dolor de la ausencia de la mujer a la que ama

Los pensionistas hablan de trombos… en los autobuses o aguardan el final en los bancos de los parques públi… entre mierda de palomas y jeringas

Los trinos de ese mirlo se derraman sobre el fiambre más reciente de la ciudad. Dicen que encontraron la jeringa