Esta iglesia no tiene lampadarios… no tiene candelabros ni ceras amar… no necesita el alma de vitriales o… para besar las hostias y rezar de… El sermón sin inciensos es como un…
Oh pedazo, pedazo de miseria, ¿en… tienes tus manos albas y tu cabeza… ... Y tanto andar, y tanto llorar… sin saber qué dolores fueron los q… Sin saber qué pan blanco te nutrió…
Viejo ciego, llorabas cuando tu vi… buena, cuando tenías en tus ojos e… pero si ya el silencio llegó, ¿qué… qué es lo que esperas, ciego, qué… En tu rincón semejas un niño que n…
Cuando estés vieja, niña (Ronsard… te acordarás de aquellos versos qu… Tendrás los senos tristes de amama… los últimos retoños de tu vida vac… Yo estaré tan lejano que tus manos…
Fragancia de lilas... Claros atardeceres de mi lejana in… que fluyó como el cauce de unas ag… Y después un pañuelo temblando en…
Hoy que danza en mi cuerpo la pasi… y ebrio de un sueño alegre mi cora… hoy que sé la alegría de ser libre… como el pistilo de una margarita i… oh mujer—carne y sueño—, ven a enc…
Cabellera rubia, suelta, corriendo como un estero, cabellera. Uñas duras y doradas, flores curvas y sensuales,
Carne doliente y machacada, raudal de llanto sobre cada noche de jergón malsano; en esta hora yo quisiera ver encantarse mis quimeras
Flor el pantano vertiente la roca; tu alma embellece lo que toca. La carne pasa, tu vida queda toda en mi verso de sangre o de se… Hay que ser dulce sobre todas las…
Mientras camino la acera va golpeá… el fulgor de las estrellas me va r… Se me cae un pensamiento como se c… del carro que tambaleando raya los… Oh pensamientos perdidos que nunca…
Desde el fondo de ti, y arrodillad… un niño triste, como yo, nos mira. Por esa vida que arderá en sus ven… tendrían que amarrarse nuestras vi… Por esas manos, hijas de tus manos…
Tierra de sembradura inculta y bra… tierra en que no hay esteros ni ca… mi vida bajo el Sol tiembla y se a… Padre, tus ojos dulces nada pueden… como nada pudieron las estrellas
Ciego, ¿siempre será tu ayer mañan… ¿Siempre estará tu pandereta pobre estremeciendo tus manos crispadas? Yo voy pasando y veo tu silueta y me parece que es tu corazón
Mujer, yo hubiera sido tu hijo, po… la leche de los senos como de un m… por mirarte y sentirte a mi lado y… en la risa de oro y la voz de cris… Por sentirte en mis venas como Di…
¿Se va la poesía de las cosas o no la puede condensar mi vida? Ayer mirando el último crepúsculo yo era un manchón de musgo entre u… Las ciudades hollines y venganzas,
Puentes—arcos de acero azul adonde… a dar su despedida los que pasan, —por arriba los trenes, —por abajo las aguas, enfermo de seguir un largo viaje
Hierro negro que duerme, fierro ne… por cada poro un grito de desconso… Las cenizas ardidas sobre la tierr… los caldos en que el bronce derrit… Aves de qué lejano país desventura…
La pata gris del Malo pisó estas… hirió estos dulces surcos, movió e… rasguñó las llanuras guardadas por… rural de las derechas alamedas bif… El terraplén yacente removió su ca…
Amor, llegado que hayas a mi fuent… cuida de no morderme con tu voz de… que mi dolor oscuro no se muera en… que en tu garganta de oro no se ah… Amor—llegado que hayas
Juegan, juegan. Agachados, arrugados, decrépitos. Este hombre torvo junto a los mares de su patria, má… cantó bellas canciones.
La tarde sobre los tejados cae y cae... Quién le dio para que viniera alas de ave?
Amigo, llévate lo que tú quieras, penetra tu mirada en los rincones y si así lo deseas, yo te doy mi a… con sus blancas avenidas y sus can… Amigo –con la tarde haz que se vay…
La mariposa volotea y arde—con el sol—; a veces. Mancha volante y llamarada, ahora se queda parada sobre una hoja que la mece.
Saudade—¿Qué será?... yo no sé...… en unos diccionarios empolvados y… y en otros libros que no me han da… de esta dulce palabra de perfiles… Dicen que azules son las montañas…
Dios -¿de donde sacaste para encen… este maravilloso crepúsculo de cob… Por él supe llenarme de alegría de… y la palabra dura supe tornarla no… Entre las llamaradas amarillas y v…
Me peina el viento los cabellos como una mano maternal, abro la puerta del recuerdo y el pensamiento se me va. Son otras voces las que llevo,
No lo había mirado y nuestros paso… sonaban juntos. Nunca escuché su voz y mi voz iba llenando el mundo. Y hubo un día de sol y mi alegría
Mi alma es un carrousel vacío en e…
Aquí estoy con mi pobre cuerpo fre… que entinta de oros rojos el cielo… mientras entre la niebla los árbol… se libertan y salen a danzar por l… Yo no sé por qué estoy aquí, ni cu…
Hoy que es el cumpleaños de mi her… nada que darle, nada. No tengo nad… Todo lo que poseo siempre lo llevo… A veces hasta mi alma me parece le… Pobre como una hoja amarilla de ot…