El tiempo pasa de prisa,
ya un mes a pasado,
desde que tu has marchado.
Tus hijas aquí estamos
aún aturdidas, sin entender...
¡Por qué! te dejaste vencer.
La llegada de septiembre
no tuvo para nosotros
trinar de pájaros.
Tu partida todo paralizó,
la primavera de septiembre...
para nosotros no llegó.
El invierno lluvioso,
de nuestras casas
no se quiere ir.
La nieve de este invierno
a sido tan intensa.
que no deja entrar al sol.
Todo se a vuelto gris...
Cuanta falta hace tu sonrisa chispiante,
tu alegría de vivir.