Miguel Peñafiel

LA TARDE DONDE EL ALMA CANTA

Poesía

 
 
La tarde se va, herida de nostalgia,
con pasos de ceniza y de jazmín.
Mi sombra se recuesta en su mortaja,
y el mundo es sólo un eco en su jardín.
 
Los astros tiemblan sobre el campo frío,
y yo... yo tiemblo más que su temblor,
porque en su fuga gris se va lo mío:
la voz que me nombraba con amor.
 
La lluvia cae como un viejo presagio,
mi alma la sigue por la calle vieja,
como un perro perdido entre naufragios
que aúlla su tristeza y no se queja.
 
Y no hay farol que alumbre mi quebranto,
ni luna que consuele esta agonía;
porque en la tarde que se va con llanto
se va la última luz de mi poesía.

Reserva derechos de autor.

Other works by Miguel Peñafiel...



Top